sábado, 4 de abril de 2020

Mi gran 2020

Todo empieza cuando terminamos el año 2019 y empezamos un maravilloso 2020 sabiendo que este año va a ser nuestro gran año, cuando hablo de “nuestro” me refiero al año de Elena y mío que esperamos nuestro primer hijo, a Nacho. La ilusión más grande del mundo.
Este año he cumplido 40 años y, aunque no me gusten las celebraciones, ha sido la mejor celebración del mundo ( el 11 de Enero ). Elena se ha encargado de hacer de este día el más especial de mi vida y con la gente que quiero (adjunto foto, jaja).



Este día lo recordaré no solo por el gran momento de mi vida, también porque es un antes y un después en mi vida, quien está conmigo y quien no va a seguir estando.
Otra de las cosas que pasan cuando cumples 40 es que empiezas a ver las cosas de diferente modo y, no sé si es por los 40 o porque nos hacemos mayores, surgen cosas que valen mucho más la pena que aceptar tener un soberbio y gilipollas “anti-amigo” en tu vida.
Y es que aparece un mal momento físico en tu vida, en su momento, o una gran oportunidad. Prefiero decir que es una “gran oportunidad”, sí señor. El replantearte la vida deportiva porque ya no eres el de antes.
Después de haber pasado unos últimos meses de 2019 pletóricos de resultados en los Trails haciendo carrerones, he empezado un enero en decadencia física. No me lo explicaba ni sabía porque cada vez estaba peor. Por qué los resultados no me acomañaban? Por qué mi sentido del humor había cambiado? Por que tenía calambres en mis extremidades? Por qué no me sentía como había sido yo hasta ahora...
Una vez ya encontrando mi nuevo Ser, aceptando lo que me ha pasado y recuperando mi físico, me doy cuenta de que ahora todo es diferente y sé que la competitividad no sirve para nada (hasta ahora he pensado que mi vida no tenía sentido sin competir o sin tener objetivos). Te das cuenta que tantas obligaciones que te has impuesto no han servido para mucho más que sentirte vivo (ya es bastante), todo es contradictorio pero te dan un mensaje claro: “Disfruta de cada uno de los momentos como si fuera el único, que lo es. Aprende a vivir el ahora porque es lo único que existe”.

¡Y aparece un virus que paraliza el mundo! Y nos damos cuenta de que el virus somos nosotros. Solo afecta a los humanos. Los animales y la naturaleza siguen viviendo su ahora y el planeta respira, respira y vuelve a respirar. El día 31 de diciembre de 2019 se dan los primeros casos de este virus, el COVID-19, en China y llegan a Europa los primeros casos. Posteriormente, a América, África... y ya es Pandemia afectando a todo el planeta.
Cada día que pasa igual que el anterior, en casa sin poder salir a hacer deporte, tomar algo o trabajar. Todos los negocios no esenciales cerrados y aprendiendo a vivir de forma relajada y diferente, como siempre habíamos soñado, sin prisas ni agobios. Reinventando nuestras casas y aprovechando para hacer todo lo que antes “no teníamos tiempo”. Convertirnos en agricultores, chefs, músicos, místicos o grandes lectores. ¡Viviendo la vida, viviendo el ahora!
Vaya paradojas...
Si nos damos cuenta, todos los malos momentos nos sirven para dar nuestra mejor versión. Y con esto voy a finalizar, las circunstancias malas nos hacen aprender, aprender a valorar lo que tenemos, quienes somos y a donde queremos ir.
¡Mi año 2020 es especial!


¿Superando límites?

Hace menos de un año que escribí mi última entrada sobre cómo era mi vida y cómo me sentía, tanto a nivel personal como a nivel deportivo. P...